lunes, 17 de noviembre de 2008
EDUCACIÓN EN FINLANDIA NO AGREDE A MAESTROS
FINLANDIA Y SU EDUCACION
Hace algunos meses, el Ministro de Educación J. Chang señaló que deberíamos seguir el modelo finlandés de Municipalización de la Educación al parecer desconociendo que no es la municipalización lo que reditua buenos dividendos a la educación en dicho país y que coloca a sus alumnos en primer lugar en las pruebas escritas PISA.
Otros mas incautos han inducido al agotado gobierno aprista a ser monitoreados por una misión finlandesa en el aspecto educativo desconociendo fructíferas experiencias socioeducativas que desarrollan docentes peruanos, como expresión del camino democrático en la educación peruana y que tiene como base la atención de los problemas psicocognitivos de los escolares, una educación centrada en la lucha antiimperialista y popular y un rescate de las propuestas pedagógicas de grandes maestros como Germán Caro Ríos.
Esta renuncia a las propuestas pedagógicas nacionales no solo profundizarán la crisis educativa sino que sumerge al magisterio peruano en mayor opresión.
Y es que en Finlandia no andan tan centrados en presuntas seudoevaluaciones pues como dice el analista chileno Valdéz- cuyo artículo transcribimos- allá se hace lo que el régimen aprista se niega a realizar aquí:
- “La educación no está centrada en rendir pruebas ni exámenes nacionales,”
- “Se enseña para aprender a ser un miembro responsable de la sociedad, ético y humano, y para dar a sus estudiantes los conocimientos adecuados para enfrentar los cambios del futuro y para seguir aprendiendo toda la vida.”
- “Existe un sentido de altruismo y cooperación más que un sentido competitivo.”, etc.
Además el modelo finlandés trata con dignidad al magisterio, cosa bien distinta a la opresión que sufrimos en el país:
-Un maestro pasa los 2,300 euros mensuales de sueldo ( o sea mas de 7,000 soles).
- Goza de 13 semanas de vacaciones (casi 3 meses)
-Tiene formación universitaria gratuita, etc.
La autonomía pedagógica del maestro es otra particularidad del modelo finlandés; las adecuadas condiciones de trabajo por la infraestructura fisica y tecnológica de sus planteles educativos y; sobre todo, el magisterio no está subordinado a las orientaciones de algún organismo financiero internacional para decidir los destinos de su educación.
Ellos siguen su propio modelo educativo que los construyen en cada plantel.
Si en el país se quiere cambiar algo para la mejora educativa no puede soslayarse el problema central del país, su condición semifeudal y semicolonial, su dependencia al imperialismo; y, menos aún, desconociendo la condición gremial del magisterio y promoviendo el linchamiento moral que dirige el gobierno aprista aprovechandose de las seudo evaluaciones y la seudo carrera pública magisterial.
En Finlandia se solucionó el problema nacional y, por ende, se soluciona el problema educativo y el problema magisterial. No es como plantean los liberales chicha afincados en el Ministerio de Educación y el gobierno aprista.
Los maestros seguiremos combatiendo no por copiar el modelo finlandés sino porque la educación sea verdaderamente científica, nacional y antiimperialista como fue allá en Finlandia hace décadas.
Para conocer algo de dicho modelo presentamos algunas apreciaciones sobre ella vertidas por un maestro chileno y que nos confirma que sin la lucha democrática de los maestros no conseguiremos jamás una educación que beneficie al escolar y al país.
A PROPÓSITO DE LA EDUCACIÓN EN FINLANDIA
La pasada semana participé en un seminario acerca de la educación en Finlandia.¿En qué consiste el llamado “milagro educativo finlandés”? Coloco a vuestra disposición mis observaciones que explicarían el éxito del sistema educativo finlandés.
Según el Proyecto PISA, los alumnos finlandeses de 15 años poseen los mejores resultados a nivel mundial, en cuanto a competencias de lectura y en matemáticas.
Cuando se analizan sistemas educativos de otros países y las variables de su éxito, existe la tendencia a imaginar que se podría imitar mecánicamente la experiencia, sin considerar el contexto histórico de esa sociedad. Digo esto porque me ha tocado escuchar un frenesí de comparaciones con Finlandia o con otros modelos educacionales, llámese Australia, Hong Kong o Corea, remitiéndose a un listado de esquemas educativos que carecen de sentido y quedan vacíos de contenido cultural si no se considera la historia de esos países.
En el caso del seminario al que asistí, los principales invitados, pertenecientes a la Universidad de Helsinsky, el Dr. Pertti Kansanen, ex Decano de Educación y profesor emérito; el Dr. Juhani Hytönen, director del Centro de Investigación para la Infancia y la Educación Básica, y el Dr. Orlando Mella, profesor de la Universidad de Uppsala (Estocolmo), tuvieron el cuidado de insistir en que el “modelo escandinavo” tiene sus características fundadas en la historia cultural de esos países. La invitación fue a observar su camino educacional.
¿Qué escuché estos días?
Lo primero, una contextualización histórica. Es simplista atribuir los resultados que obtienen los jóvenes finlandeses en estas mediciones internacionales sólo al funcionamiento de su sistema educativo, como el mismo informe PISA lo reconoce.
Finlandia es un país pequeño, donde funciona el Estado de bienestar, con una sociedad democrática muy pareja e igualitaria, donde existen equiparados principios de género en la lengua, con una posición de vanguardia en investigación y alta tecnología, de cultura luterana, disciplinada y de gran tradición educativa desde la fundación de su primera universidad en 1640, la academia de Turku.
Algunos ejemplos que puedan ilustrar lo que digo. Para la religión luterana, es importante la lectura personal de la Biblia. De hecho el propio Lutero, en un acto fundamental, la tradujo al alemán, estimulando a los propios creyentes a acceder a los textos bíblicos. Desde el siglo XVI, predicando la lealtad a la monarquía sueca, se impuso el luteranismo en Finlandia, inculcando al pueblo un fuerte sentimiento de moral cristiana. Lo más significativo, para efectos posteriores en la escuela, fue que durante 400 años pastores luteranos enseñaron a leer a los finlandeses, dado que existía la prohibición de casarse si las personas no sabían leer.
Durante el dominio sueco, Finlandia era sólo un grupo de provincias sin identidad nacional. Pero desde su anexión a Rusia en 1809 se convirtió en un ducado autónomo del zar ruso, constituyendo así su unidad nacional y territorial.
Durante este período floreció el movimiento nacionalista finlandés que promovió la lengua finesa, inspirando su accionar en la literatura y los periódicos (Finlandia es uno de los países donde hoy en día, se lee más diarios), fomentando con ello, la identidad cultural de la gente, a pesar de la dominación extranjera. No es casualidad que las mujeres finlandesas fueran las primeras de Europa en alcanzar el derecho a sufragio en las elecciones parlamentarias. Un último ejemplo. En 1921, cuando Finlandia era ya un país independiente, se implementó por primera vez una ley de enseñanza obligatoria para todos los niños y niñas mayores de 7 años. ¿Por qué a los 7 años? A las escuelas había que ir a pié o esquiando, las familias tenían miedo a los lobos, sin embargo, un niño de 7 años, por su desarrollo físico, ya puede huir de los lobos y correr para salvar la vida. Esa norma se ha mantenido vigente hasta hoy, por propia voluntad de los padres, existiendo satisfación con la calidad de las guarderías infantiles, mostrando que no hay apuro con el proceso de escolarización.
Por lo tanto, las competencias lectoras de un país tienen que ver con la historia y creencias de sus ciudadanos para la valoración de la lectura en su propia vida social, cultural o política. Por otra parte, las decisiones de enseñanza se inscriben en las cientos de experiencias históricas que van desarrollando los pueblos.
He sintetizado ocho puntos claves del sistema educativo finlandés, que escuché de estos invitados. Curiosamente para ellos, no ha sido la tecnología, ni los computadores, ni la firma Nokia, los factores diferenciadores de este “milagro educativo”. Veamos:
La educación escolar y universitaria es gratuita, lo cual implica el resguardo de un derecho esencial de todos los ciudadanos y una valoración del Estado como protector social. Existe homogeneidad en la calidad de los centros escolares. No hay más de 10 escuelas privadas en todo el país, conectadas con las escuelas de los sistemas Waldorf, Montessori o religiosos. Los temas educacionales no son puestos en el debate político entre los partidos.
La educación no está centrada en rendir pruebas ni exámenes nacionales, se enseña para aprender a ser un miembro responsable de la sociedad, ético y humano, y para dar a sus estudiantes los conocimientos adecuados para enfrentar los cambios del futuro y para seguir aprendiendo toda la vida. Existe un sentido de altruismo y cooperación más que un sentido competitivo.
Existe descentralización y autonomía para definir el curriculo. Cada 5 años, este se discute y modifica por parte de los propios profesores de una localidad, sobre la base de orientaciones del Estado. Esto implica que todos los profesores definen sus necesidades y participan en la generación de sus planes y programas, a través de un proceso democrático en que se involucra alumnos y apoderados a nivel local municipal.
La educación es inclusiva para todos y todas. Los postulantes a un centro escolar son admitidos sin exclusión por sus dificultades, tampoco hay separación de sexos. La enseñanza está centrada en el niño. Los padres pueden analizar en conjunto con los profesores el plan de aprendizaje personal de sus hijos.
Existe una sólida, minuciosa y gratuita formación universitaria de los profesores, (para mí el factor esencial). La profesión docente está bien considerada y valorada socialmente. Un 26% de los egresados del sistema escolar aspiran a ser profesores.
Para ingresar a las carreras de pedagogía se hace una rigurosa selección, sólo es admitido cerca del 10% de los postulantes. Lo más relevante en el examen de selección son las características personales y la vocación del postulante a pedagogía. Lo básico de la formación de un profesor es que tiene que aprender a realizar investigación, manejar teorías, adquirir competencias metodológicas y de metacognición, a producir conocimiento a través de resultados de estas indagaciones, transformándose en experto investigador. Al mismo tiempo tienen un 30% de su aprendizaje como práctica, en estudios de casos y resolución de problemas reales.
Esto permite que los maestros no sean meros repetidores de conocimientos, sino personas con gran capacidad reflexiva. El constructivismo se practica en detalle. Se les exige un grado de Maestría según los acuerdos de Bologna, para lo cual tienen que hacer una tesis de investigación. Los profesores que quieren tienen acceso directo al Doctorado.
En el caso de los profesores de la escuela básica, hasta el nivel de 6° grado, están preparados para enseñar con solidez todas las asignaturas del plan de estudios. Durante más de 5 años, deben formarse en lenguaje, matemáticas, ciencias naturales, historia, ética, estética, religión y tecnología, en música y artes, en literatura infantil y drama, en educación física y manualidades, además de adquirir conocimientos de educación especial. Aprender métodos de enseñanza tiene menor importancia que la capacidad de un profesor para reflexionar y tomar decisiones en función de su práctica pedagógica. No existen evaluaciones formales de desempeño de los profesores, se confía en ellos. Los profesores tienen libertad pedagógica, dado que son expertos en sus áreas. Los sueldos están en el rango medio, fluctuantes alrededor de los 2500 dólares mensuales (con todas las consideraciones de contexto económico del país).
Un día escolar: en la básica entre 8 y 9 horas, los pre-escolares sólo 4 horas (700 horas anuales, 6 orientaciones de contenido diferentes), los mayores 6-7 horas diarias. El número de alumnos por clase: 26 en la básica, 36 en la media. No hay deserción escolar, no hay alumnos repitentes, todo el grupo etáreo pasa de curso y los profesores son 100% responsables de que sus alumnos aprendan. A las 15 horas los profesores terminan su labor, luego desarrollan tareas administrativas, corrigen trabajos y elaboran sus proyectos. Recuerden que según la época, en esas latitudes anochece a las 4 de la tarde.
Existe un gran sentido de responsabilidad social de la escuela por practicar la cooperación en distintos aspectos de la disciplina escolar. Destaco el esfuerzo especial hacia aquellos alumnos con más dificultades de aprendizaje o adaptación, quienes reciben atención especial dentro de la educación ordinaria, a cargo de equipos formados por alumnos, profesores, sus padres y otros expertos. Es importante destacar que esta responsabilidad se extiende hasta el sistema carcelario finlandés donde se imparte la educación básica a los reclusos.
Cada uno y cada una, no saque todavía sus propias conclusiones. Siga investigando.
Fuente: www.educandonos.cl/node/626
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario